martes, 12 de mayo de 2009

PENSAMIENTOS SOBRE LAS MADRES.


"Aunque ambos, padre y madre, son los que engendraron al hijo, la maternidad de la mujer constituye una parte especial de este "ser padres" de los dos, y además, la parte de mayor compromiso. Es la mujer, de hecho, la que directamente se entrega al engendrar, lo que literalmente absorbe las energías de su cuerpo y de su alma. El hombre, por su parte, contrae una especial obligación para con la mujer"
A las trabajadoras de una fábrica en Marca, marzo 19, 1991..

"Por desgracia, la mujer encuentra frecuentemente dificultades objetivas que hacen más oneroso y a veces hasta el heroísmo, sus deberes maternos. No es raro, con todo, que esos agobios insoportables se originen en la indiferencia y la inadecuada asistencia, debido también a leyes poco sensibles al valor de la familia y a una cultura deformada, que exonera indebidamente al hombre de su responsabilidad familiar, y en casos peores, lo lleva a considerar a la mujer como objeto de placer o simple instrumento reproductivo. Contra esta cultura opresiva deben promoverse todas las legítimas iniciativas que fomentan la auténtica emancipación femenina"
Oración del Angelus, agosto 14, 1994. .

"La mujer tiene derecho al honor y al gozo de la maternidad, como un regalo de Dios, y al mismo tiempo, los hijos tienen también el derecho al cuidado y solicitud de quienes son sus padres, y particularmente a los de la madre. Por esta razón las políticas familiares deben tener en cuenta la situación económica de muchas familias, que se ven condicionadas y seriamente obstaculizadas en el cumplimiento de su misión".
Ante el Pontificio Consejo para la Familia, marzo 24, 1994. .

"En la educación de los hijos tiene un papel de primerísima importancia la madre. Debido a la especial relación que la une al niño sobre todo en los primeros años de la vida, ella le ofrece ese sentido de seguridad y de confianza, sin el cual le sería difícil desarrollar correctamente su identidad personal, y después, establecer relaciones positivas y fecundas con los demás. Esta relación original entre madre e hijo tiene además un valor educativo muy especial en el plano religioso, porque permite orientar a Dios la mente y el corazón del niño, mucho antes de que inicie una educación religiosa forma".
Mensaje por la paz, enero 1°, 1995. .

"Nunca se insistiría lo suficiente en el hecho de que la mujer debe valorarse en todos los aspectos de la vida. Sin embargo, tenemos que reconocer que, entre los dones y los trabajos que le son propios, resalta con particular relieve su vocación a la maternidad. Con ella, la mujer asume algo así como un papel de fundamento de la sociedad. Es un papel que participa con su comparte masculina, pero no cabe duda que la naturaleza de ha otorgado a ella la mayor parte (…). La misión materna es también fundamento de una especial responsabilidad. La madre ha sido hecha custodia de la vida. A ella le toca acogerla con ternura, favoreciendo ese primer diálogo del ser humano con el mundo, que se realiza precisamente en la simbiosis con el cuerpo materno. Allí es donde comienza la historia de todos los hombres.
Oración del Angelus, julio 16, 1995.

No hay comentarios: